Una alternativa a Starbucks

Buenas a todos, sé que me estoy lanzando últimamente a escribir mucho sobre lugares donde salir y comer en Madrid, pero es que me encanta. Uno de mis pasatiempos favoritos es comer fuera, descubrir sitios nuevos... por eso mismo, hoy quiero hablaros de un pequeño café que está al principio de la c/San Bernardo, casi haciendo esquina con Gran Vía. 

Se trata de un sitio con mucho encanto, muy al estilo de Starbucks tanto en el ambiente como en el tipo de productos que ofrece: cafés de diferentes estilos, frappés, tés... y una pastelería muy refinada.

Lo que más me llamó la atención de este lugar fue la tranquilidad y el ambiente de relax que ofrecía. Starbucks es uno de mis locales favoritos, pero es cierto que a veces la cantidad de gente que llena el local rompe ese ambiente de desconexión que reinaba al principio.

Sin embargo, estoy hablando de este local en concreto, ya que investigando un poco más, pude averiguar que se trata de una cadena que tiene 5 locales en Madrid y hasta uno en Logroño. 

El surtido de productos es muy similar al de la marca americana, aunque se ve que este sitio está empezando y se esmeran más, tanto con los adornos de los cafés (cappuccinos con espuma en forma de corazón u otras cosas, lo que se conoce como "Latte Art") como con la mayor cantidad de nata que ponen (en Starbucks cada vez es más reducida).

Su carta incluye:

toda variedad de cafés: Cappuccino, Bombón, Ristrello, Machiatto, Baileys Coffee, Irish Coffee, Americano;

multitud de tés, desde los normales hasta los menos comunes como el Té Cappuccino Cream y el Matcha Latte; frappés de todos los sabores (café, frutas varias..) tanto con crema como sin ella, muy al estilo

Terrazas de verano...diferentes

Como se suele decir, ya ha llegado el verano y con él las terrazas, aunque este año debido a la ley antitabaco ya llevaban un tiempo por aquí. Tanto para disfrutar de unas cañas con los amigos como un cocktail en un plan más chic, las terrazas se llenan cada año de gente en busca de desconectar de la realidad diaria. Aunque son pocos ya los locales que no ofrecen a sus clientes la posibilidad de tomar sus productos en una terraza, hoy os propongo algunos  sitios donde disfrutar de esta tradición tan nuestra de una manera diferente:

Librería Ocho y medio: 

Librería Ocho y Medio

Una de las mejores librerías y tiendas de cine de la capital ha abierto recientemente una cafetería y una terraza donde poder disfrutar de un buen refresco o una cerveza fría, y todo ello, rodeado del glamour del recién inaugurado `Paseo de las estrellas´, junto a los cines Renoir y Golem en un ambiente muy agradable.

Dónde: c/ Martín de los Heros 11

Una cena interactiva en el centro de Madrid

Aunque lo parezca, no es real

Fondo de tulipanes

Uno de mis vicios favoritos es comer fuera y descubrir nuevos lugares. Por ello, hace un tiempo aproveché una de las ofertas de Groupon y adquirí un cupón por la mitad de precio de un restaurante del que había visto un reportaje en la televisión y ayer por fin me decidí a ir. La curiosidad del sitio es que se trata de un restaurante temático. Es decir, cada mesa es digital y te permite ir cambiando de fondo a tu antojo de manera táctil así como visualizar la carta y cada plato antes de pedir en la propia mesa. 

Al margen del ambiente audiovisual, el local ofrece una carta a base de cocina mediterránea dentro del marco de la nueva cocina creativa. Pese a que no cuenta con mucha variedad en cuanto a número de platos, sí la tiene en cuanto a diferentes opciones: ensaladas,

¿Paseo de Estrellas?

Paseo de las Estrellas de Madrid

La razón por la que escribo este post es tal vez la más nimia pero que para mí comporta uno de los factores por los que el cine español está tan mal valorado por los españoles: su elitismo. Los actores y directores del cine español siempre se quejan del poco éxito del cine español en este país, como si el problema fuera de los ciudadanos y no de lo propios productos. He de reconocer que el prejuicio que sostiene al cine español es lo que hace que la mayoría de la gente ya ni se moleste en comprobar si es cierto, exceptuando casos excepcionales de directores concretos (Almodóvar o Amenábar), o incluso películas que intentando a propósito evitar la seriedad conocida del cine español, acaban haciendo meras imitaciones del (peor) cine americano irreverente que, por supuesto, tiene más audiencia (Spanish Movie). Pero quitando esos casos, y también últimamente ciertas películas de terror de calidad como El Orfanato, lo cierto es que el cine español ha cosechado lo que ha sembrado.

Esa seriedad con la que identifican los espectadores este cine no es más que el elitismo que
desprenden, y que hace que grandes películas pasen desapercibidas simplemente porque el español medio busca una imagen más cercana y amable, no sentir que le miran por encima del hombro por el hecho de preferir una experiencia más evasora y menos intensa. Porque el cine debe ofrecer ambas cosas y eso es algo que el cine español olvida a veces.